ERRATAS. Diario de un editor incorregible relata con importantes dosis de ironía y pasión los momentos más importantes de la aventura personal y profesional del editor italiano Marco Cassini, ofreciéndonos sus reflexiones sobre los avatares de una editorial cultural en un entorno difícil y complejo, pero no exento de satisfacciones y alegrías.
«Con el oficio que he elegido esperaba una vida distinta a la que llevo. Imaginaba largas jornadas leyendo manuscritos que iban a cambiar la historia de la literatura, conversaciones en figones llenos de humo con escritores legendarios, esclarecedoras reuniones con colaboradores que continuarían en cenas memorables. Había creído poder repetir fácilmente la experiencia del New Yorker de William Shawn, de la Shakespeare & Co. de Sylvia Beach, del Grupo Bloomsbury de Virginia Woolf o de la Einaudi del trío Vittorini-Calvino-Pavese.»
LA EDAD DE LA INOCENCIA
(agosto)
Marco Cassini
Editor italiano (minimum fax)
Aquel verano leí la autobiografía de Diana Athill1, donde habla de su medio siglo en el mundo de la edición, junto a André Deutsch, un intelectual húngaro que después de la Segunda Guerra Mundial fundó en Londres la editorial que lleva su nombre. Refiriéndose a los primeros años de oficio y a uno de los primeros libros que decidió publicar, Athill recuerda: